¿Qué es la huella de carbono? En corto, un indicador ambiental que calcula la cantidad de gases de efecto invernadero que un producto emite durante su ciclo de vida. Es decir, el impacto directo o indirecto de la fabricación o descomposición de un producto en el medio ambiente.
Por supuesto, cada material es diferente. Para compararlos adecuadamente, se debe aplicar un mismo método para analizar qué huella de carbono dejan los distintos tipos de envases. En el caso del envase de cartón para bebidas (también conocido como “brik”) hablamos de un impacto reducido, al generar sólo 32 gramos de emisiones contaminantes durante su fabricación (lo que pesan 8 monedas de 2 céntimos en la mano).
¿Qué son los envases de cartón para bebidas?
Se trata de envases seguros por su condición multicapa (que protege el contenido del oxígeno, de las bacterias y de la luz) y altamente eficientes por su capacidad de envasado (sólo hacen falta 27 gramos de promedio para envasar 1 litro de leche) y, en consecuencia, en cuanto a su transporte (más producto en menos camiones). Además, su oferta se extiende a una gran variedad de tamaños y formatos que se ajustan a las necesidades del consumidor.
Envase de cartón para bebidas: la huella de carbono más baja Trazabilidad del cartón para bebidas
Según estudios de evaluación del ciclo de vida (ACV), en comparación con las botellas PET y con las botellas de vidrio de un solo uso, el envase de cartón para bebidas supone una reducción de la huella de carbono del 47% y del 80%, respectivamente.
Esto se debe a:
- El uso mayoritario de materias primas de origen renovable. La industria del cartón para bebidas está comprometida con el abastecimiento responsable de recursos naturales renovables. Alrededor de un 75% de un envase es papel, pero en su fabricación solo se utiliza madera de bosques gestionados de forma responsable.
- La ligereza y eficiencia en el transporte y almacenamiento sin necesidad de refrigeración (en el caso del envasado aséptico). En un solo camión, se pueden transportar 19 500 litros de leche usando envases de cartón para bebidas, mientras que en el caso de las botellas de vidrio, los litros posibles de transportar se reducen a 13 000.
Objetivo: continuar reduciendo la huella de carbono
Durante la fabricación de envases, el uso de materiales con bajo contenido de carbono (o descarbonización) es clave para reducir la necesidad de recursos fósiles y alcanzar la neutralidad climática.
Apostar por el envase de cartón supone optar por envases seguros y funcionales, que garanticen la reducción del desperdicio de alimentos, y que estos lleguen a los consumidores sin perder su valor nutricional. En esta línea, ACE ha elaborado una Guía para el diseño de envases de cartón para bebidas por y para el reciclado.